Cabecera

“¿Habrá alguna cultura en la que el dibujo, el límite de los montes, la frontera entre lo terrestre y lo vacío del cielo tengan un nombre? Pues sí, el vasco. El nombre de la ladera –egi, quiere decir verdad. Pero ¿es qué hay una verdad antes que esta verdad de la ladera? Lógicamente. Antes existía utseski, que quiere decir borde, marco del vacío, por eso el primer mito en vasco es el cielo, y luego el de la tierra”. Jorge Oteiza.

 

La verdad de las laderas. Oteiza al tomavistas

“Las montañas son mamíferos”, nos cuenta Oteiza en su biblia Quosque tandem y en esta cabecera nos lo corrobora. Las siluetas del perfil de las cordilleras filmadas por él mismo parecen tener vida propia tras los ojos del cineasta. Respiran. Rodada en los 60 con su propio puño y ojo, en los paisajes guipuzcoanos de las campas de Urbia y Aranzazu, el valor de estas imágenes es precisamente pertenecer a un super8 inédito que él mismo defendía con estas palabras:

“Toda la geología de los montes son como los apóstoles. Son abiertos, uno es un medio cilindro, otro aquí, otro allá y así siguen. Yo tengo una pequeña película en super8 que empieza por sacar todos los montes como si fueran los apóstoles”.

“El hombre que huye entra en el cine”, nos decía Oteiza, pero el hombre que rueda hace lo contrario: se recluye en una espacio que felizmente le aprisiona, el paisaje que le rodea y que funciona como ese hueco desde el que miraba el cielo en la playa de Orio en la que de pequeño se enterraba. Oteiza plantado en medio de su preindoeuropeismo, en el corazón del País Vasco, nos muestra rocas, prados, cimas, collados y lomas, y gira en torno a ellos como un faro que no deja ningún punto ciego en su derredor. Oteiza defensor de la primera toponimia, la que viaja más atrás de 80 abuelas, señala con su cámara el hueco antes que las montañas y repite: aizpitarte, la sensilidad para nombrar el espacio vacío…el hombre que mira el hueco.

El resultado es una fiesta de geometrías diversas recreadas en la naturaleza que será el aperitivo que dé entrada a todas las sesiones del festival de 2017. Oteiza, el cineasta sin cine, quiere atraparlo aquí todo, desde su pequeño universo, y experimenta una pulsión fímica en estas imágenes del perfil de las montañas que dominan en lo que en principio iba a ser un super8 familiar (la familia aparece escasos segundos, después todo es recreo de la mirada por el paisaje). Contra los que abogan y defienden a un Oteiza despegado de la inspiración en la naturaleza, aquí este testimonio. Las montañas, apóstóles del horizonte.

Oteiza y su tomavistas, como lo llamaba él –recordemos que usaba también el término “cuartilla” cuando escribía-, panea de izquierda a derecha para acto seguido volver panear de derecha a izquierda, dos movimientos contrarios –que no contradictorios- y que en las escuelas de rodaje ortodoxo se conciben como un pecado. Oteiza el blasfemo del arte, el enemigo de la técnica, el defensor de un cine del instante sin memoria, es el mejor Oteiza en este vaivén de montañas. Su mirada no para quieta, solo se detiene ante lo sagrado, un grupo de caballos en la lejanía, animal tótem para Oteiza, defensor de la vuelta del arte a las cavernas. Y como en una tabla de orientación, el hombre con la cámara parece estar repetidiéndonos el mantra de la vieja toponimía, la línea de cimas filmadas: Atxuri, Aketegi, Aizkorri, Aitzabal… y hacía el otro lado: Andreaitz, Urdajamentu, Azkiola, Zulaiko, Arbalain… y de nuevo: Arri-urdin, Erriko-aitza, Arkaitz, Botreaitz… Mecidas por la luz, dedica a esta película dos días y en el final de la segunda jornada se ve que espera a que el día se apague. Es entonces cuando el ocaso viste de negro la tarde, y la montaña y su concavidad celeste conforman una hermandad lejana donde el hombre parece que nunca ha estado. O desde donde nunca jamás regresó. 

La película a la que pertenece esta cabecera lleva el título de "Urbia" y se podrá ver en la sesión "Oteiza, el hombre que huye" de la undécima edición de Punto de Vista.

Promueve
Gobierno de Navarra
Organiza
NICDO
Con la ayuda de
Con la financiación del Gobierno de España. Instituto de la Cinematografía y las Artes Audiovisuales Acción Cultural Española Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia Financiado por la Unión Europea. NexGenerationEU
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