Especialista en rodar gente solitaria que vaga por el paisaje más salvaje de Montenegro, el protagonista de sus filmes siempre es el hombre en el horizonte. En concreto The smoke es la tercera pata de una trilogía de héroes (como él mismo los llama en los créditos) que surcan el karts de las montañas alrededor de la bella bahía de Boka Kotorska. Este tercer héroe camina monte arriba por el mismo sendero desde tiempo inmemorial, una acción que repite calcada durante las cuatro estaciones del año. Su objetivo, siempre el mismo: mantener vivo el fuego en una casa abandonada.