Todo comenzó con un viaje en autobús, un libro de Phillip Lopate y un ladrón. Muhammad viajaba de Singapur a Kuala Lumpur leyendo un pasaje dedicado al ensayo fílmico en Totally, Tenderly, Tragically. «¡Entonces yo también quise hacer un ensayo fílmico! Los ensayos están necesariamente relacionados con el ego. Le estás diciendo a alguien que tu punto de vista es suficientemente importante como para que se callen y escuchen, aunque sólo sea por unos minutos. Una vez que atraes su atención, es un lujo intentar establecer una conexión». Nada más bajarse del autobús le robaron la cartera, y a partir de ahí se sucedieron una serie de acontecimientos que desembocaron en Lost. El resto de los cortometrajes se sucederían de la misma manera. Muhammad quiso documentar lo que había vivido y comprobar cómo su experiencia podía volverse cine. Tomó prestada la cámara de un amigo y revisitó durante un día aquellos mismos lugares. Sin actores, ni guión. Pura espontaneidad. Y siempre tratando de rescatar los detalles aparentemente insignificantes que se dan por hecho.
PREMIOS:
Lost
SINGAPURE INTERNATIONAL FILM FESTIVAL 2002, Premio de la Crítica en la categoría Best Asian Digital Film
Kamunting
SINGAPURE INTERNATIONAL FILM FESTIVAL 2003, Mejor Película Digital Asiática
Pangyau
2003 SUBSTATION EMERGENCY FILMMAKING PROJECT, Mejor Cortometraje
2002 MALAYSIAN VIDEO AWARDS, Bronze Award Mejor Cortometraje