El británico Peter Gidal para cerrar este viaje por los cielos con su mirada vertical que juega a la nada: el cielo es mucha veces el vaciado de la imagen, no más que una presencia sutil de aire en la pantalla. Pero de repente un avión la cruza y nuestra ilusión vuelve a trastocarse… hasta la próxima vez… nada y algo en perpetuo juego aéreo.