Homing

Bandadas de pájaros transitan los cielos de nuestras ciudades, atraviesan descampados y parajes naturales. A veces parecen hermosos; otras, oscuros y amenazantes. Pueden resultar poderosos, pero también sugerir indefensión.

Emplear la palabra para describir esta película quizás sea jugar en su contra, quebrar su propuesta, volverla rígida. Sería una suerte llegar a ella en silencio. La película avanza sin la guía de un texto, una voz o una presencia humana clara, y esta desnudez narrativa es su principal fuerza y motor. Toda nuestra atención recae, entonces, en sostener el tiempo con el que se filma a estas criaturas en los diversos espacios y arquitecturas que habitan.

Subyace una gran erudición en estas imágenes que no necesita ser explicitada. El cineasta tan solo muestra, traza un ritmo y un hilo de secuencias sugerente. Y lo hace de un modo libre y misterioso: une lo humano y lo animal sin categorizar ni encerrar nada.

Anna Brufau