Primer ejercicio de filmar la muerte, como se dice en el filme “para perderle el primer miedo”. Diálogo de Oliver Smolders con sus imágenes familiares de archivo en un viaje aparentemente feliz a Venecia truncado por la tragedia. Tiempo circular que nos muestra con maestría un comienzo de la vida muy vecino a su propio final, al son de La Valse du souvenir de Chostakovitch, y con los mejores rostros que nos regala la infancia y su juego.