Una mujer en la playa viaja tumbada por el aire con su mirada, la voz de Neil Amstrong nos avisa que ya hemos llegado al mar de la tranquilidad del título, mientras las olas y el agua ayudan al vuelo. El cielo como una mancha de formas densas que palpitan, visto desde la escafandra de un astronauta satisfecho con el mundo y consigo mismo.